domingo, 4 de julio de 2010

DESAZON NACIONAL

No lo digerí, no lo digiero y no lo digeriré por un tiempo bastante prolongado. Tengo una tristeza enorme producto de la ilusión que había creado, esa ilusión de ver a Mascherano levantando la copa en el Soccer City el domingo aunque eso signifique verlo desnudo a Maradona en el obelisco, que siendo así lo hubiese disfrutado con muchísimo gusto.
Son esos partidos en los que no podes hacer nada: nosotros no nos levantamos bien y ellos estaban “con todas las luces”. El hecho de empezar 0-1 a los tres minutos de empezar te tira por la borda todo. Una desconcentración en defensa tan temprano te deja condicionado durante todo el partido.
De más esta decir que Alemania empezó mejor el partido dominando territorial y futbolísticamente el partido, el gol de Muller los hizo ganar en tranquilidad para manejar el encuentro durante los primero 20, 25 minutos. Sin embargo, lentamente, el equipo argentino se hizo dueño de la pelota aunque era muy tibio cuando intentaba atacar, no tuvo chances claras para anotar y en una que otra jugadas no encontraron mal parado cuando implementaron su mejor arma, el contragolpe.
El segundo tiempo empezó distinto al primero, lo cual esperanzaban a los Argentinos de dar vuelta la historia y quedar nuevamente entre los cuatro mejores del mundo después de 20 años, sin embargo el equipo de Diego no aprovecho esas aproximaciones y en la primera chance que tuvo el 11 de Joaquim Low convirtió uno de los goles que mas me dolieron en mis 17 años. Esa conquista de Klose (un delantero temible que con estos dos goles esta a uno del record de Ronaldo como máximo anotador de las copas de del mundo) empezó a sentenciar el triste final de Argentina en Sudáfrica. A partir el equipo de desordeno por completo y llegaron dos goles mas para un 4 a 0 exagerado. Quiero dejar una cosa en claro: de ninguna forma Argentina esta cuatro goles debajo de NINGUNA selección del mundo, ¿Cómo se explica esta goleada entonces? Como dije al principio, son partidos extraños donde a un equipo le sale todo y al otro nada. Lamentablemente fuimos este último.
Necesitaremos mucho tiempo para cicatrizar esta profunda herida, pero hay que levantar la cabeza y empezar a planificar la Copa América del año que viene, que después de dos finales seguidas perdidas con Brasil, jugando de de local, no se nos puede escapar.

No hay comentarios:

Publicar un comentario